Comisión Antidistorsiones: ¿Predominaron los criterios políticos y sociales sobre el enfoque técnico?
La composición de la instancia -donde están representantes de cuatro ministerios más Aduanas-, le resta un carácter eminentemente técnico, señalan académicos y ex diplomáticos.
- T+
- T-
El costo social de cerrar la Siderúrgica Huachipato, con la pérdida de 20 mil empleos asociados, así como una mayoría de representantes del Gobierno -cuatro de distintos ministerios, más Aduanas- en la Comisión Antidistorsiones son algunos de los factores que, según distintos expertos, hacen que la decisión de poner derechos antidumping a barras y bolas de acero sea no solo técnica, sino que también tenga un componente político e influya el entorno social.
Consultado por la estructura de la Comisión Antidistorsiones, el exdecano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Manuel Agosin, reflexiona que no debería estar integrada por representantes de ministerios, sino “nombrarse la mejor gente” y estar integrada por expertos en temas de competencia: “Deben ser técnicos, con alguna sensibilidad por lo que está sucediendo”.
Pese a no tener análisis técnico específico respecto a este caso, Agosin reflexiona que es “bastante sospechoso” que casi de la noche a la mañana China haya aparecido exportando el 50% del acero que se transa en el mercado mundial. Más allá de los números, reconoce que siendo Gobierno no se atrevería a dejar a más de 20 mil personas sin sustento, “simplemente porque de repente me quedé bajo el precio de importación” o “porque los chinos aparecieron repentinamente en el mercado mundial”.
ALEJANDRO JARA
“Como tiene mayoría del Ejecutivo, la Comisión puede decidir de manera que no observe plenamente los criterios técnicos”.MANUEL AGOSIN
“Creo que (los integrantes de la Comisión) deben ser técnicos, con alguna sensibilidad por lo que está sucediendo”.JAIME GALLEGOS
“Quizás el asiento que más me hace ruido es el de Agricultura, siendo que muchas veces los asuntos no necesariamente son agrícolas”.
Más que política, el académico cree que es una determinación “social”. “Darle un par de años a la compañía para que se recupere y haga más eficiente su producción, me parece una salida bastante razonable”, asegura. Sin embargo, advierte que, “si pasan dos años y la compañía no ha hecho nada para mejorar, la decisión tiene que ser otra obviamente, porque la plata pública no está para subsidiar una empresa ineficiente. “No es un cheque en blanco para la compañía”.
El exdirector general adjunto ante la OMC Alejandro Jara hace ver que aunque la Comisión “está diseñada para actuar en un marco técnico (las normas internacionales de la OMC y las nacionales), como tiene mayoría del Ejecutivo puede decidir de manera que no observe plenamente los criterios técnicos de las normas referidas”.
Pese a que el ex embajador enfatiza que “no estoy diciendo que en este caso ello haya sucedido”, advirtió que “sí me consta que ello ha pasado” en otras oportunidades.
Por su parte, Jaime Gallegos, profesor del Departamento de Derecho Económico de la Universidad de Chile, cree que, más allá de los votos disidentes del Banco Central y la FNE, “en cierta medida hay un proceso que cumplió con las reglas” y no porque estos organismos hayan votado distinto se pierde el carácter técnico de la decisión final.
Pensando en la conformación de la Comisión, reflexiona que quizás el asiento que tiene el Ministerio de Agricultura parece “inoficioso, siendo que hay muchos temas que no necesariamente tienen que ver con agricultura”. Pero indica que es entendible que asientos como el de Economía -que se relaciona con los sectores productivos- y Relaciones Exteriores- que apoya en procesos de inversiones extranjeras- estén en la Comisión. “Quizás el asiento que más me hace ruido es el de Agricultura, siendo que muchas veces los asuntos no necesariamente son agrícolas”, remarca.
Asegura que “no todo tiene que ser una tecnocracia, puesto que las autoridades también tienen que tener cierta legitimación y sensibilidad a otro tipo de elementos más allá de lo absolutamente técnico”.
Exdirector adjunto OMC: “Es mal momento para subirle los costos a las mineras”
¿Qué impacto tendrán las sobretasas? El exdirector general adjunto de la OMC, embajador de Chile ante ese organismo y extitular de la Direcon, Alejandro Jara, explicó que al menos hay tres efectos. Por un lado, comercialmente en las empresas chinas la medida tendría un impacto limitado, dado que Chile es un mercado relativamente pequeño para ellas y hay destinos alternativos. Por otro lado, hizo ver que exportadoras chinas tienen inversionistas chilenos que se verán afectados por las sobretasas, por lo que también afecta a la economía nacional. Y por último, destacó el impacto que tendrá en la minería, dado que se encarece un insumo como el acero en un momento en que las empresas mineras intentan bajar los costos para compensar las bajas leyes de mineral, que encarecen la extracción. “Es un mal momento para subirles los costos a las empresas mineras”, resumió Jara.
Por otro lado, el experto precisó que el acero siempre ha sido un mercado complicado en el mundo y que antes del ingreso de China al comercio internacional, hubo acusaciones contra Japón e India.
¿Hay o no dumping en el acero? “En algunas empresas, no en todas, hay indicios, pero este es un tema técnico y primero se debe probar la existencia de dumping, luego se debe probar que eso genera perjuicios y de qué envergadura es este perjuicio”, señaló. Alejandro Jara hizo ver que la Compañía Siderúrgica de Huachipato tiene un historial de peticiones de protección arancelaria de muchos años. “Pareciera que esto no está resuelto y creo que el problema es de una naturaleza diferente, de carácter estructural”, aseveró.